Compartiendo en el mundo social de emprendedores de alto calibre en materia de innovación y observando con detenimiento el nivel de ocupación que tienen los profesionales impositivos e informáticos sobres los nuevos cambios fiscales que impactaran la dinámica comercial, apreciamos una serie de situaciones que las instituciones responsables deberían considerar para que factores ocultos o sobrepuestos, aporten a la equidad, que deberían tener todas las empresas, principalmente las mipymes.

El gobierno que correctamente tiene un enfoque de disminuir la evasión, puede también tomar en consideración otros criterios que pueden colocar en condiciones favorables el desempeño fiscal de las más pequeñas en volumen pero fuertes en voluntad.

A continuación esbozamos algunas ideas que los lectores podrían estar de acuerdo y afinar con su experiencia, para tener una dinámica impositiva de preventa y proactiva, más que correctiva:

  • Durante los primeros cinco años, donde la mortalidad empresarial es elevada, eliminar el anticipo y disminuir a tasa fija del 15% del impuesto sobre la renta, para que este monto sirva como parte de la capitalización de la nueva empresa.
  • No considerar las cuentas incobrables o en legal como parte de la actividad económica empresarial, ya que ese ingreso tiene dudosa o nula recuperación.
  • Eliminar como parte de la actividad económica anual, aquellos valores que por incendio, robo, pérdida o merma que tenga el negocio, ya que esto reflejaría un desempeño operacional transparente. Este mecanismo podrá ser demostrado por instituciones como bomberos, policía y aseguradoras son sus respectivos documentos oficiales.
  • La aplicación de créditos, por servicios no brindados y que son pagados, como los casos de los servicios básicos que forman parte de la operaciones y que en ciertos momentos del mes presentan averías.
  • La aplicación de una deducción especial en el impuesto sobre la renta para las partidas de prestaciones laborales justificadas (previamente avisadas al ministerio de trabajo) ya que el empleado con bajo desempeño y con ausencia de valores afectan los resultados de la empresa.
  • Este proceso de adecuación han conllevado y representará un aumento en los gastos de honorarios/consultorías de servicios profesionales, que necesariamente afectan las finanzas de una mipyme.
  • Los autónomos o independientes podrían tener una consideración especial de impuestos, para cuando sus operaciones de cada trimestre se vean afectadas.
  • Presentar un régimen especial para empresas con vocación de exportación y modalidad espaciada de crédito (no es lo mismo vender al contado que a 120 días), ya que en ambos casos demandan de oxigenación económica para mantener operaciones que requieren crédito y competir en los mercados.
  • Disminuir el anticipo/impuesto sobre la renta en un % apreciable para aquellas pymes que años contra años, pueden demostrar a través de la seguridad social que su planilla de empleados a crecido en más de un 50 %.
  • En el caso de las micro y pequeña, así como los autónomos, considerar todos los gastos no superiores a un salario mínimo, como parte de las operaciones, ya que muchas veces las finanzas personales se ven mezclada con las de la empresa.
  • Delimitar la calidad de los servicios públicos, donde queden definidos los tiempos de respuestas que deben de dar a los empresarios, de forma tal que mejore la calidad y la rapidez que se deben recibir. En nuestro país, las relaciones con instituciones con muchas instituciones públicas existen procesos que pueden exceder los 180 días, lo que conlleva gastos, ocupación y distracción del motivo principal de la empresa, que es la producción de riquezas.
  • Auditar y exigir una adecuada presentación de ingresos (fondos) hasta tercer grado de consanguineidad a los funcionarios públicos que manejen presupuestos superiores a los mil salarios mínimos, así evitamos la competencia desleal y reducimos la corrupción estatal.
  • Aplicar una penalización (sustitución de puestos, recortes de fondos, eliminación de fondos y de beneficios a los 50 principales funcionarios de la dependencia) que violan la ley de presupuesto y por ende conlleva a que las instituciones de recaudo nacional muestren una ansiedad de recursos y una reactividad poca armoniosa con el mipyme empresariado.

Estas recomendaciones al final del día, lo que buscan es traducir a un equilibrio que todo aquel que tiene entre 1-50 colaboradores, pueda seguir generando riquezas.

Debemos dejar atrás, el sabor amargo que percibe o vive la masa de dueños de mipymes, sobre el hecho de que pagar impuestos es una acción que alimenta el ineficiente y permeado socio estatal, que, en vez de mejorar su oferta de servicios, lo que hacen es hacerla más mediocre.

Detrás de todo esto, también se busca que el principal activo de una empresa, que es la calidad de su gente y el dueño(a) tengan la clara vocación y presupuesto para retenerlo, y con esto reducir la migración de talento y el empleo informal.

Quien hizo la ley también se inventó la trampa, pero entiendo que es más juicioso y saludable para los dominicanos,  ¨Quien hizo la ley, la hizo para que todos viviéramos mejor¨.

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